Testimonial, histórica, hermosamente escrita. La única novela publicada por Harper Lee y un clásico de la literatura estadounidense. La visión de una niña de pueblo que descubre los valores, injusticias y misterios del mundo, influenciada por los cambios propios de los años 30 en los Estados Unidos.
Por: Jherson Rubén García Danós

Aunque comúnmente clasificada para niños o adolescentes, este libro no podría tomarse como tal. Es cierto que su lenguaje infantil, producto de narración en primera persona de Scout Finch (de 8 años de edad), hace creer que estamos ante un libro de travesuras infantiles, pero eso solo resulta introductor para el universo de texto.
Las primeras aventuras entre Scout, su hermano Jem y Dill, el amigo de ambos, nos transportan a un universo en donde la curiosidad sin malicia hace las veces de catalizador de situaciones que se pueden trasponer a cualquier niño de su edad.
Sin embargo, es aquella misma curiosidad la que permite a Scout cuestionar el mundo que la rodea. Para ello, la figura de su padre juega un papel fundamental. Atticus Finch es un arquetipo moral que tiene respuesta para todo. A pesar de ser viudo, y contar sólo con el apoyo de una empleada, se las ingenia para criar a sus hijos bajo fuertes conceptos morales, alineados con sus valores e ideales de justicia que también aplica en su profesión de abogado.
La novela está dividida en dos partes. Como hemos mencionado, la primera está enfocada en las travesuras y el espíritu de curiosidad de Scout y sus amigos; principalmente, abocados al misterio de la casa de los Radley y que centra toda su atención durante varios años. Junto a Jem y Dill, se ingenian un sinnúmero de estratagemas para acercarse y descubrir lo que oculta esta propiedad.
La segunda parte inicia con varias peleas entre Scout y sus amigos y parientes. La calificación de que Atticus Finch era un amanegros es lo que provoca aquellas luchas. La razón la descubre cuando su padre le cuenta que ha decidido defender a una persona de raza negra en un juicio de violación interpuesto por uno de los vecinos mas despreciables del pueblo, pero de raza blanca. Eso ha provocado reacciones de todo tipo en el pueblo.
A partir de aquí, la curiosidad de la niña se renfoca en discutir los prejuicios e hipocresías que reinaban en la Alabama de los años 30, en los Estados Unidos. Las acciones de Atticus, las de su hermano, así como la del resto de vecinos del pueblo van a desatar en Scout una serie de cuestionamientos y argumentos que le permitirán comprobar que el mundo en el cual vive no es del todo feliz como creía.
Cabe resaltar que la autora usó muchos de sus recuerdos y experiencias para crear esta novela. En muchos aspectos, el libro tiene tintes autobiográficos y se basa en sucesos que realmente sucedieron. Esta obra permitió que Harper Lee ganara el premio Pulitzer.
Matar a un ruiseñor es , con justicia, un clásico de la literatura contemporánea. Uno de los libros más leídos en lengua inglesa y casi un requisito fundamental para los escolares de los Estados Unidos; aunque debería serlo de todo el mundo, sin importar edad.
LA CITA
“– Esto pensaba yo también –dijo por fin– cuando tenía tu edad. Si solo hay una clase de personas, ¿por qué no pueden tolerarse unas a otras? Sí todos son semejantes, ¿cómo salen de su camino para despreciarse unos a otros? Scout, creo que empiezo a comprender una cosa. Creo que empiezo a comprender por qué Boo Radley ha estado encerrado en su casa todo este tiempo… Ha sido porque quiere estar dentro.”
Capítulo 25. Segunda Parte.
Contexto: Luego de visitar el juicio en el que participa su padre como abogado, Jem le dice a Scout que no puede comprender los prejuicios y el desprecio de las personas entre ellos. Ha comenzado a descubrir que el mundo es ordenado por las ideas preconcebidas de los adultos; sobretodo, de aquellos que detentan cierto poder y que no necesariamente son justas.
DATOS DE LA PUBLICACIÓN ORIGINAL
- Nombre oficial: To Kill a Mockingbird
- Autora: Harper Lee (Estados Unidos)
- Fecha de publicación original: 1960
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