Los hijos de Húrin – J.R.R. Tolkien

En el legendarium del gran autor británico, El señor de los anillos es solo una de las grandes historias que fueron desarrolladas en el universo de la Tierra Media. Durante años, Tolkien trabajó incansablemente en construir un mundo de leyendas y héroes míticos que serían protagonistas de epopeyas únicas, reflejando los dramas y sentimiento humanos con la más notable de las purezas.

Los hijos de Húrin es una de esas historias. Mencionada como un antiquísimo relato ya en los tiempos de Frodo y el Anillo Único, este mito es la versión «tolkiana» de Edipo Rey, la tragedia de un príncipe que, por más que lo intenta, no puede escapar de su destino.

Por: Jherson R. García

En el gran teatro clásico griego, Edipo, rey de Tebas, es un personaje de leyenda. Atado a su destino, Edipo es el causante de inimaginables desgracias tanto en su familia como en el pueblo al que gobernaba. A pesar de sus intentos, el personaje recogido por Sófocles nunca puede escapar de aquel dramático sino de su vida. Para Edipo, no existe alternativa, la desgracia vive en él y lo acompaña hasta el fin de sus días.

En la mitología creada por J.R.R. Tolkien, Túrin Turambar es Edipo. Hijo de Húrin, uno de los grandes capitanes de los hombres en los tiempos antiguos, la fatalidad es inherente a la vida de Túrin. Adosada a su existencia, esta fatalidad lo llevará hacia el desenlace crítico y mortal de su propio linaje. Tras cada desventura, Túrin va creando un cuadro más sombrío del sí mismo, un dibujo más alicaído de la ruina de los hombres de su pueblo y que, tras una breve esperanza de una vida mejor, se desbarranca debido al poder de una inevitable maldición.

Tolkien desarrolla el drama con un estilo bastante habitual en sus relatos menos conocidos. A pesar de la gran difusión que ha tenido El señor de los anillos, cuyo final; si bien no totalmente feliz, marca el viaje exitoso del héroe, muchas de los otras historias de la Tierra Media son dramas de lamentable desenlace. La creación de la historia de Túrin y su hermana Niënor no escapa a esta característica y su composición final fue el resultado de una de las baladas más trabajadas por el filólogo británico a lo largo de su vida (sus primeros esbozos se ubican muy anteriores a la creación del El Hobbit).

En Túrin se recogen los defectos de los hombres de noble espíritu. A diferencia de Aragorn o Beren (de la historia de Beren y Luthíen), Túrin es un guerrero de habilidades incomparables y con una destreza sin par, aunque un elevado orgullo y un resentimiento insondable siempre lo acompañan. No sabe por qué su padre no ha retornado de la guerra, no comprende por qué los que se dijeron sus amigos no ayudaron a su familia durante su infortunio, no entiende por qué debe ocultarse de sus enemigos. En el interior de Túrin conviven el agradecimiento hacia quienes le tendieron una mano en la adversidad; pero, a su vez, la cólera de sentir que dicha mano lo retiene para poder vengar las desagracias su pueblo. Desconocedor de la maldición que le hicieran a su padre, Turín cree que puede cambiar su destino enfrentándose solo a todos sus enemigos. No es consciente de que esa actitud es la que desencadenará la condena de sufrimiento que pesa sobre su familia.

Capitán en las fronteras del Doriath, líder de proscritos en tierras arrasadas, héroe de gran renombre en Nargoroth…; pero también, asesino (aunque causal) de sus propios camaradas y causante de lamentables desgracias por sus malas decisiones. Túrin es impulsivo, valeroso e imprudente. No es capaz de encontrar calma, la venganza fluye por su espíritu y, tras muchas desdichadas aventuras, solo logra encontrar una paz provisional en la compañía de la doncella Níniel, sin saber que dicho encuentro sería el culmen máximo de su tragedia.

Editado por Christopher Tolkien, Los hijos de Húrin nos muestra el profundo trabajo que realizaba el J.R.R. Tolkien en la construcción de cada una de sus historias. Cargada de gran detalle con respecto a paisajes míticos y sentimientos internos, este libro nos hace creer que la historia realmente sucedió y que podría formar parte del corpus de leyendas de alguna mitología antigua. La mente de Tolkien era tan profunda que, aún hoy, nos queda la duda de qué más historias y leyendas estarían en su pensamiento, qué más héroes y baladas poblarían aquel universo inimaginable que es la Tierra Media.

La cita

«—Todas mis acciones y mis días pasados han sido oscuros y llenos de maldad, pero ha llegado un nuevo día. Aquí me quedaré en paz; renuncio a mi nombre y mi linaje, y así quizá dejaré atrás la sombra, o al menos no caerá sobre los que amo.»

La llegada de Túrin a Brethil

Contexto: Túrin está cansado. A donde va, su presencia solo trae la desgracia sobre sus seres amados, causándole grandes lamentos y desasosiego. Cree que si exilia en los bosques de Brethil, junto a un grupo de refugiados, podrá tener la paz que añora. No sabe que es él, Túrin Turambar, el imán de esas calamidades y que, a donde vaya, el infortunio siempre lo acompañará.

Datos del libro

  • Nombre original: The Tale of the Children of Hurín.
  • Nombre en español; Los hijos de Húrin
  • Autor: J.R.R. Tolkien (Inglaterra)
  • Edición revisada: Minotauro, 2007.
  • Traducción: Estela Gutiérrez

Puedes descargar el libro en formato PDF, EPUB o MOBI haciendo clic aquí.

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